Materia de Aplicaciones Móviles y Servicios Telemáticos
Al finalizar la sesión de clase, el estudiante será capaz de:
Diseñar aplicaciones que utilicen los sensores embebidos en dispositivos móviles para la entrega de información a los usuarios en tiempo real.
Los sensores integrados en los teléfonos inteligentes son una solución de bajo costo que permite interacciones entre el ser humano, el ordenador y el entorno.
Algunos ejemplos son las aplicaciones diseñadas para identificar la ubicación del usuario mediante un receptor GPS, los juegos que utilizan acelerómetros y/o giroscopio, las antenas Wi-Fi y Bluetooth que intercambian información entre usuarios, los micrófonos que perciben los movimientos gestuales del usuario, etc.
Acelerómetros: Se encargan de la detección de movimiento basada en ejes y pueden encontrarse tanto en teléfonos como en pulsómetros.
Giroscopio Ayuda al acelerómetro a entender en qué dirección está orientado tu teléfono, añade otro nivel de precisión para que esas esferas fotográficas de 360 grados sean lo más impresionantes posible.
Magnetómetro: Mide los campos magnéticos y, por tanto, puede indicarte hacia dónde está el norte variando su salida de tensión hacia el teléfono.
GPS (Sistema de Posicionamiento Global): Recibe una señal de un satélite en el espacio para saber en qué parte del planeta te encuentras (o por dónde conduces).
Sensor de proximidad: Suele situarse cerca del altavoz superior y combina un LED de infrarrojos y un detector de luz para saber cuándo te acercas el teléfono a la oreja y poder apagar la pantalla.
Sensor de luz ambiental: El sensor de luz ambiental hace exactamente lo que cabría esperar: mide la luz de la habitación y ajusta el brillo de la pantalla en consecuencia (si está configurado para que se ajuste automáticamente).